Las tabernas centenarias del centro de Madrid son lugares llenos de encanto e historia, cañas bien tiradas, vermut de grifo y deliciosas tapas
Que sería de Madrid sin sus tabernas, con cañas de cervezas tiradas como Dios manda y el vermut de grifo, acompañados de una buena tapa. Es una gozada pasear por el centro de Madrid, y descubrir esas tabernas centenarias llenas de encanto y con tanta historia a sus espaldas.
Por eso, tras las tiendas centenarias y las pastelerías centenarias, hemos seleccionados nuestras siete tabernas centenarias del centro de Madrid, que un buen madrileño tiene que pisar al menos una vez en su vida.
Taberna Antonio Sánchez
La taberna Antonio Sánchez es la taberna más antigua de Madrid. Se desconoce la fecha exacta de su fundación pero se sabe que es anterior a febrero de 1787 cuando se publica en el Diario Curioso, Erudito, Económico y Comercial su traspaso como negocio dedicado al despacho de vinos. Una taberna con casi 250 años de historia en la que disfrutar de la mejor cocina tradicional española
En 1884 es comprada por Antonio Sánchez Ruiz, hijo de conocidos taberneros y de quien recibe su nombre actual. Su hijo, el torero Antonio Sánchez Ugarte, heredó la Taberna convirtiendola en un lugar de referencia en Madrid y punto habitual de encuentro de personalidades como Pío Baroja, Sorolla, Marañón, Camba, Cossio, Juan Cristóbal Vázquez Díaz y Antonio Díaz Cañabate, acogiendo la última exposición del afamado pintor Ignacio Zuloaga del cual fue gran amigo y alumno Antonio Sánchez.
La decoración de la taberna destaca por su antigüedad convirtiendola en un verdadero museo. Nunca ha sido renovada por lo que mantiene intactos como ninguna otra frisos y decoraciones de madera tallada, lámparas de gas con las que se iluminaba el local, el elevador manual de frascas y frescos con los rostros de los famosos toreros Frascuyelo, Largartijo y cara Ancha.
Su carta está entregada a la cocina casera tradicional española y madrileña. Son famosos sus platos de rabo de toro, cocido madrileño, olla gitana y callos a la madrileña. También cuentan con propuestas vegetarianas, y como datos de interés, se puede pedir comida para llevar y admiten mascotas.
Dirección: Calle del Mesón de Paredes, 13, 28013 Madrid
Casa Alberto
La taberna Casa Alberto fue fundada en 1827 en el solar donde estuvo el edificio en el que Miguel de Cervantes vivió, es uno de las tabernas centenarias más destacados de Madrid, en el que se puede disfrutar de la gastronomía tradicional madrileña con un toque vanguardista y de un vermút de grifo elaborado en la propia taberna.
Situada en el Barrio de las Letras, de aquella época todavía conserva recuerdos de Cervantes, expuestos en la segunda planta de la taberna, junto a otros más actuales: su librillo de zinc junto a la hermosa barra de ónice y madera, su botellero, su manómetro de fabricación de agua de Seltz, su antiguo y valorado grifo, la caja registradora, las columnas y unas taquillas donde se vendían entradas para la clá de los teatros.
En tiempos de Fernando VII, los madrileños acudían a Casa Alberto a tomar un chato de vino con un huevo duro y un trozo de bacalao. En la actualidad, los clientes pueden degustar platos típicos como callos a la madrileña y bacalao. La especialidad es el rabo de toro estofado, considerado uno de los mejores de todo Madrid.
Dirección: Calle de las Huertas, 18, 28012 Madrid
Casa Labra
La taberna Casa Labra fue fundada en 1860 en las inmediaciones de la Puerta del Sol. Su mayor reclamo lo constituyen las tapas, sobre todo la de bacalao, en tajadas recién fritas y en croquetas, así como de platos típicos madrileños, como el rabo de toro o los callos, tapas variadas, entrantes y una cuidada selección de vinos.
El local conserva su decoración original, con una fachada curva adaptada a la estructura del edificio y un curioso cartel de cristal con el rótulo del establecimiento. En su interior, además de su mostrador de zinc y las tradicionales mesas de mármol, el visitante puede recrear la vista en las pintadas y numerosos refranes que hacen alusión a la historia del local.
Y es que este restaurante ha pasado a la historia de Madrid, entre otras cosas, porque en él fundó Pablo Iglesias, en la clandestinidad, el Partido Socialista Obrero Español, concretamente el 2 de mayo de 1879.
Dirección: Calle de Tetuán, 12, 28013 Madrid
Bodegas La Ardosa
En 1892, Rafael Fernández abrió varias tabernas con el nombre de La Ardosa, en recuerdo del pueblo del mismo nombre de la provincia de Toledo. La de Malasaña conserva todavía elementos de su decoración original, como el rótulo de cristal grabado, el zócalo de azulejos y el ventilador.
La Ardosa se ha convertido en un lugar único donde, durante estos años, han ido enseñando a muchos aficionados a degustar cerveza de forma diferente y a muchos camareros a darle importancia a la forma de servirla.
Ofrecen una gran variedad de cervezas irlandesas a precios muy asequibles, vermouth de grifo, cervezas rubias, buenos vinos de la Ribera y de Rioja. Para picar ofrecen canapés variados, salmorejo, salazones, cecina de León o jamón de pato, pero, sobre todo, destaca su tortilla de patatas, la especialidad de la casa y una de las mejores de toda la ciudad.
Dirección: Calle de Colón, 13, 28004 Madrid
La Casa del Abuelo
Cuentan que Andy Warhol se apostaba en su barra cada vez que llegaba a Madrid y en ella permanecía impávido viendo servir chatos de vino y platos de gambas a destajo. La Casa del Abuelo en Sol, es una taberna tradicional, de las de toda la vida, que ha enseñado y mostrado a miles de madrileños, españoles y extranjeros la cultura de la tapa, a base de las mejores gambas y langostinos y el mejor vino dulce de Madrid.
La carta que presenta La Casa del Abuelo es muy sencilla: gambas, langostinos y carabineros en todas sus exquisitas maneras de cocinarse: gambas a la plancha, gambas al ajillo, langostinos plancha, gambas gabardina, banderillas langostinos, croquetas de gambas y chato de vino o cerveza. Una breve pero exitosa carta.
Un lugar basado en la tradición de todo un siglo, fundado en 1906, que ha conseguido sobrevivir a la las últimas modas gastronómicas como el fast food o la nouvelle cuisine. La Casa del Abuelo tiene dos sedes más en Madrid, una en Goya y otra en la calle Victoria.
Dirección: Calle de Núñez de Arce, 5, 28012 Madrid
Taberna La Dolores
Taberna La Dolores, original de 1908, es otras de las tabernas centenarias que se encuentran en el Barrio de las Letras. Muy conocida en la ciudad por la calidad de su cerveza y fácilmente reconocible por por su bella fachada de azulejos, decoración tradicional de la época.
En su interior acogedor, donde destacan la madera y los carteles antiguos, se sirven pinchos y montaditos fríos muy apreciados a la hora del aperitivo, especialmente los fines de semana, cuando este establecimiento es más visitado.
Dirección: Plaza Jesús, 4, 28012 Madrid
Taberna de Ángel Sierra
En la misma plaza de Chueca, el corazón de uno de los barrios más vanguardistas de la ciudad, se encuentra esta taberna de las de antaño, que transporta a varias décadas atrás a todo aquel que entra.
La taberna de Ángel Sierra abrió sus puertas en 1917, una vez que Ángel Sierra reformó el establecimiento con azulejos de La Cartuja de Sevilla y madera de Cuba. Más tarde la llevó su hijo y cuando este falleció su hermana Carmen y su mujer Elvira. Actualmente la gerenta Felipe Gallego.
Es muy famoso su vermut de grifo de Reus, actualmente reconocido oficialmente como el mejor de Madrid. Además de un buen aperitivo típico madrileño, unas buenas aceitunas, unos canapés, berenjenas de almagro, anchoas y atún en escabeche son algunas de las propuestas para acompañar con la bebida.
Dirección: Calle San Gregorio, 2, 28004 Madrid
Os habéis dejado Casa Camacho en la Calle San Andrés….otro sitio encantador.
El Anciano..Rey de los vinos,frente a la Almudena..
Casa Mariano en calle Lope de Vega, con la esencia a taberna de antaño , el mejor jamón de bellota y sus inigualables callos ( receta de familia)
Casa Mariano en calle Lope de Vega, con la esencia a taberna de antaño , el mejor jamón de bellota y sus inigualables callos ( receta de familia)
Stop Madrid, en la calle Hortaleza, casi esquina a Gran Vía. Centenaria, y con un servicio maravilloso