Desde ayer todos los madrileños que pasan por el Manzanares se están quedando consternados por el hallazgo del todo inusual, un cetáceo, de 15 metros de longitud, ha aparecido esta mañana en el cauce del río madrileño. ¿qué hace un cachalote en el Manzanares?
Al parecer, el viernes, alrededor de las tres de la mañana, se instaló un elemento con forma de ballena junto al puente de Segovia, en la zona de Madrid Río. El estanque se encuentra acordonado y cada vez son más los curiosos que se acercan y bordean a este especímen.
Tranquilos, este proyecto artístico denominado «Whale» viene de la mano del colectivo belga Captain Boomer, y simula cómo se activa un caso real de emergencias ante una ballena varada. Así, durante este fin de semana, los actores y científicos que integran esta compañía, se vestirán de investigadores que «atenderán» a la ballena varada, una escultura hiperrealista de más de 15 metros y 1.000 kilos de peso que replica, a escala real, un cachalote macho de 18 años. Estará allí instalado hasta este domingo y su misión es poner el dedo en la llaga del cambio climático y el desdén ante el cuidado del medio ambiente.
Esta performance ya se realizó con anterioridad en ciudades como Londres, Amberes o París. Ahora llega a Madrid y se convierte en la primera actividad que el Ayuntamiento de Madrid ha incluido en el programa cultural de CiudaDistrito, que contará con más de 200 actividades en 21 distritos de la ciudad.
Las redes se han revolucionado y todos quieren fotografiar la realista estructura del cachalote. Con el hashtag #UnCachaloteEnMadrid las redes sociales se están llenando de imágenes y comentarios de esta impactante escultura que ya estuvo en París en 2017.
Según narra una leyenda popular, el río Manzanares acogió en sus aguas una ballena. Como recoge «El Diccionario Geográfico Popular de Madrid», escrito por Camilo José Cela Conde, hijo del autor de «La Colmena», en cierta ocasión corrió por la capital la voz de que por este río bajaba una ballena. Al conocer la noticia, fueron muchos madrileños los que bajaron a la rivera armados con picas y chuzos con intención de matar al animal. Sin embargo, cuenta el relato anónimo que no fue mas que una barrica de vino, que el bodeguero quiso salvar de la corriente a la voz de «va llena».