Está claro que a nadie le gusta que le peguen un “hachazo”. Pues bien, acaba de abrir en Madrid el primer establecimiento de España donde puedes dar unos buenos hachazos, y me estoy refiriendo al termino literal de la palabra, ya que se trata del lanzamiento de hachas, una variante más rústica de los dardos o el tiro con arco de toda la vida.
Ha llegado a España un nueva actividad: el lanzamiento de hacha. Se trata de un deporte bastante popular en regiones nórdicas, como por ejemplo Canadá, donde lo practican más de 100.000 personas, pero que en España es prácticamente desconocida.
Vincent y Adrien son dos franceses que descubrieron este deporte por casualidad, y se engancharon rápidamente. Ahora residen en Madrid, y decidieron abrir El Hachazo, un centro de tiro pionero en España.
Cada sesión dura una hora, e incluye el adiestramiento básico, la práctica, distintos retos y juegos y la competición. “En realidad no es difícil acertar en la diana”, explica Vincent. “Es como lanzar dardos, ¡pero a lo grande!”.
¿Es una actividad segura? “Si se realiza en condiciones adecuadas no es más peligroso que la petanca o el baloncesto. Los instructores explican las normas de seguridad y enseñan cómo lanzar, las zonas de lanzamiento están separadas con mallas de acero”, asegura el fundador.
Los emprendedores están seguros del éxito de su actividad, ya que consideran que “lanzar el hacha conecta con nuestros instintos prehistóricos, nos atrae”. De momento, con el centro que han abierto en Madrid pretenden dar a conocer la actividad. “La gente puede disfrutar de algo emocionante con los amigos o con el grupo de trabajo de su empresa, echarle emoción a una cita romántica o una salida en pareja, o simplemente divertirse con una actividad liberadora”, concluye.
El local está en el centro de Madrid, en la calle Narciso Serra, y las tarifas se sitúan en 15 euros por hora por cada persona que participe en la actividad.
Servicio impecable, muy amables tambien. Ya he ido varias veces y todo, una maravilla
Coincido contigo jesus todo impecable